domingo, 31 de julio de 2011

es...para....TI!

Esto es lo que pedía. Todo lo que siempre quería, simplemente alguien que te quiera tanto como para prometerse amor eterno. Ahora entiendo que para esto hay que sufrir y hay que madurar, hay que saber llevarlo por el buen camino, pero poco a poco se consigue entre las dos. Ha sido raro, ha sido bonito, algo que no me esperaba y que el destino hizo que ocurriera. Claro que, con el paso de tiempo, no será bonito, será precioso y perfecto.
Aun así es sufrido, no quiero tener que ocultarme, no quiero mandarle un mensaje a escondidas mientras estoy con gente, no quiero tener que esperar a verla ni esperar a que me conteste. No quiero ir por detrás y no quiero callarme, no me apetece. Quiero hablar contigo cada vez que quiera estemos con quien estemos, porque además tengo que aguantar la distancia. Las malditas 6 horas que nos separan ahora y después. 6 horas...en 6 horas puedo darte dos mil millones de besos, en 6 horas puedo estar durmiendo abrazada a ti, despertarme siete veces y nunca soltarte la mano aunque estemos cada una en una cama, en 6 horas puedo ir al cine contigo, comer contigo, tocarte el pelo, reirme, hablar absolutamente de todo y quererte. Todo eso puedo hacer en 6 horas. Pero no puedo porque las vias del tren han decidido que no.
Creo que esta será la última vez que escriba en este blog, no es porque la inspiración haya desaparecido, ni porque no me apetezca escribir. Si no porque antes necesitaba desahogarme de alguna manera, hablar de mi soledad, de lo que no podía contar y de mi vida, pero ahora aunque también necesite desahogarme escribiendo se lo escribo a otra persona. La persona que quiero y que querré toda mi vida, la que me ha dado confianza, sabiduría y amor. La que ha decidido estar a mi lado para que no vuelva a estar sola. Ya no necesito un ordenador y un teclado, ahora solo tengo que coger un boli y un papel y darselo directamente a ella, mi motivo de habla y lo único en lo que pienso.
Mi amiga, mi compañera de clase, mi motivo de diversión, mi motivo de sufrimiento. Eres el amor de mi vida, mi primer amor. Pesi.



Te quiero, Te quiero