lunes, 15 de febrero de 2010


Mirando por la ventana del tren veia calles llenas de pintadas y casas viejas que tapaban edificios altos con vistas a un lejano mar. Paseé por calles sin dirección con el factor frío y ese peculiar aunque a veces desagradablemente especial olor que define la ciudad, por eso me gusta tanto.
A las 8, habiendo pasado por delante de mí el aclamado Johan, haciendose esperar aparecieron los primero sonidos venidos de un teclado mezcla entre Enter shikary y The Prodigy. Después de descubrir que me gustaban sonó un rock and roll raro pero bastante pegadizo por Lightpeed Champion con el que la gente empezó a entrar en calor.
Unos cuantos saltos, unos cuantos gritos...hicieron que la espera a Mystery Jets no fuese tan larga. Sin presentación, porque no la necesitan, entró Blaine Harrison en muletas con orgullo, sin verguenza y con todas sus ganas de hacernos uno de sus mejores conciertos sentado en una silla. Pero llegó, porque tenía que llegar, el momento cumbre. Se veía un abrigo y una melena difusos entre unas luces amarillas y los primeros acordes de una guitarra hicieron que las 35.000 personas que allí se encontraban sintieran ese sonido como nunca lo habían sentido. Un destello de luz improvisado y una primera sílaba que Alex cantó por el micrófono. ¿Frío? yo ya no sabía que era eso. Los sonidos me invadían, Un golpe de batería como jamás había escuchado y una voz en directo que tantas veces me había desesperado por oír.
Canción - Flash Canción - Flash Canción - Flash
200 Flashes alcanzaron.
Brianstorm, Dance little liar, Crying Lightning, Pretty visitors, 5o5, My propeller, Fluorescent Adolescent, The view from the afternoon, When the sun goes down, Cornerstone...y un largo etc. Sonidos que se metieron en mi memoria y nunca lograrán escapar. Vistas que se metieron en mi memoria fotográfica y nunca lograrán salir...
¿Sabes lo que se siente al escuchar a uno de tus grupos favoritos en directo? de esos que dices: nunca voy a ver, es imposible. ¿sabes lo que se siente al cumplir uno de tus sueños?
Mereció la pena dormir en la calle a menos 1000 grados.

1 comentarios:

MariaRG dijo...

pff esa sensación al oir unos simples acordes, de ese grupo que te ha acompañado en tantos momentos...es algo que no tiene precio